Los presidentes de Barcelona y Emelec, José Francisco Cevallos y Nassib Neme respectivamente, no llegaron a un acuerdo sobre el ingreso de la hinchada torera al estadio George Capwell para el próximo Clásico del Astillero, tras una reunión que sostuvieron este lunes con el gobernador del Guayas, Julio César Quiñónez, y representantes de la Policía Nacional.

Emelec, que será local en este encuentro del campeonato ecuatoriano de fútbol, se niega a vender entradas a los aficionados de Barcelona, al considerar que no existen las condiciones de seguridad para un partido de vital importancia como este.

El directivo canario Alfredo Cuentas aseguró tras el encuentro, desarrollado en las instalaciones del Cuartel Modelo (norte), que la Policía Nacional garantizó la seguridad de los asistentes al Clásico. Eso lo ratificó el viceministro del Interior, Diego Fuentes.

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Pese a que Quiñónez sugirió que solo se dispute el partido con aficionados eléctricos, él también ratificó la garantía de seguridad a cargo de la Policía.

Ahora queda en manos del Comité Ejecutivo de la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF), decidir el martes cómo se conformará el público del Clásico, pendiente por la tercera fecha de la segunda etapa del torneo y que está programado para las 16:00 del miércoles. (D)