La gran leyenda del fútbol Johan Cruyff nunca ganó un Mundial, en gran parte porque, tras perder 2-1 ante Alemania la final de 1974, no quiso jugar cuatro años más tarde en Argentina. La razón por la que el holandés, fallecido el jueves anterior, no acudió a la convocatoria de la Naranja Mecánica para la Copa del Mundo 1978 sigue siendo una incógnita.

Holanda volvió a llegar a la final, en la que perdió 3-1 ante Argentina y en la que lamentaron amargamente la ausencia del Holandés Volador.

Una de las hipótesis mencionadas en la época fue un conflicto con la Federación Holandesa por causa de las primas. Otra teoría, que aún circula, es “que no quería ir a Argentina para protestar contra la dictadura de Jorge Videla (en el poder entre 1976 y 1981 y condenado por crímenes contra la humanidad)”, revela Jordi Finestres, amigo de Cruyff.

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Durante sus años como jugador del Barcelona (1973-1978), Cruyff se labró una reputación de no tener miedo a hacer públicas sus ideas políticas sobre la dictadura de Francisco Franco. “Johan se definía como un hombre ‘social’, ni de derechas ni de izquierdas, pero creía en las sociedades libres y democráticas”, contó Finestres. Pero la motivación no fue política, explicó el propio Cruyff en una entrevista al diario peruano Deporte Total. “Si hubiera sido por causas políticas, nunca habría jugado en España durante la dictadura de Franco”, afirmó.

“Había anunciado mi retirada de la selección en 1977. Me cansé, había cumplido mi ciclo. Se inventaron muchas historias sobre eso”, declaró. Sus razones fueron más personales, como desveló en 2008, 30 años después de los hechos, en las ondas de Cataluña Radio.

Antes del Mundial fue víctima, junto con su familia, de un intento de secuestro en su casa de Barcelona. “Vino alguien y me puso un rifle en la cabeza, estaba atado, mi mujer atada, junto con los niños en el piso de Barcelona”, recordó el exastro. Tras ese ataque, “mis hijos iban al colegio con la policía, y en mi casa también tuve vigilancia unos cuantos meses. Llega un momento que dices ‘basta’. Hay momentos en que hay otros valores en la vida”, añadió.

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Tomó la decisión de no alejarse de su familia y de no ir a Argentina 1978. “No tuvo ninguna repercusión” sobre su carrera ya que ya había alcanzado la gloria, asegura Jordi Marcos, autor junto con el periodista Xavier Torres de un documental sobre el formidable jugador. El único Mundial que disputó Cruyff fue el de 1974, en el que la selección naranja cedió ante la escuadra dueña de casa (como pasó en Argentina), liderada por el alemán Franz Beckenbauer. (D)