Gritando consignas como “¡No perseguimos un muerto, perseguimos la verdad!”, un grupo de cerca de 40 personas llegó la mañana de ayer al malecón Simón Bolívar, a la altura de la calle Loja, para protestar contra la colocación del obelisco en honor al expresidente de la República y exalcalde de Guayaquil, León Febres-Cordero.

Los manifestantes, quienes se identificaron como integrantes del movimiento social Acuerdo Ecuador, también exhibieron globos con imágenes de personas fallecidas durante el gobierno de Febres-Cordero (1984-1988), entre ellas las del banquero Nahim Isaías, los hermanos Santiago y Andrés Restrepo, y la de Consuelo Benavides.

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“Habemos guayaquileños que estamos en desacuerdo hasta que no se aclare qué pasó con bastantes personajes que fueron desaparecidos, torturados y muertos”, dijo Johnny Aldás, miembro del grupo.

Los protestantes no pudieron ingresar a la planchada del Fortín, donde desde el pasado 15 de marzo permanece el obelisco a Febres-Cordero, debido a que las puertas del Malecón estaban cerradas y el contorno, enrejado. Sin embargo, allí se congregó un grupo de personas que sí están de acuerdo con la instalación del obelisco de Febres-Cordero. “¡Esto no es pagado, León se lo ha ganado!”, gritaban ellos.

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Fotos y video de Katherine Mendoza

Pero, a más de las personas que estaban en la planchada, hubo otro grupo que logró llegar hasta el área donde estaban los integrantes de Acuerdo Ecuador. Allí se produjo una pugna de barras en favor y en contra de la gestión del exalcalde de Guayaquil.

“Nosotros estamos completamente de acuerdo y agradecidos con el ingeniero León Febres-Cordero”, expresó Saúl Pilligua, quien dijo ser presidente del comité del Barrio Bellavista en el sector de Barrio Lindo.

La situación fue seguida de cerca por la Policía Nacional y los metropolitanos.

Luego de algunos minutos de enfrentamiento verbal, los miembros de Acuerdo Ecuador decidieron retirarse del lugar, en medio de los gritos de los simpatizantes del obelisco LFC: “Son más globo que gente”, dijeron en relación con el número de personas que se manifestaron en contra.

Al finalizar la protesta, Alexandra Mora, una productora que trabaja en el Centro Cultural Libertador Simón Bolívar y que en ese momento respaldaba a Acuerdo Ecuador, fue abordada por un hombre de contextura gruesa, piel canela y que lucía un sombrero. Él le arranchó un cartel y dos globos.