Imagine una hamburguesa: Pan, lechuga, tomate, queso, huevo, pero que en lugar de la carne molida tenga una porción de champiñón asado. ¿Puede asimilarlo?
Esta opción de comida rápida no solo constituye una alternativa vegetariana, también es la propuesta de Invedelca S.A., empresa que estudia los beneficios de este vegetal e impulsa su consumo, y que asegura que puede reemplazar a las carnes, por sus componentes.
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Diego Estrella, especialista en los beneficios de los champiñones y colaborador de la compañía, señala que estos contienen altos porcentajes de complejo B, que está presente en las carnes, pero que estos lo poseen en mayor cantidad.
Este elemento y el hecho de que los hongos tienen una cantidad elevada de proteínas, los convierte en sustitutos de las carnes, afirma Estrella. Esto sin mencionar que son bajos en grasas y calorías, que hacen de estos un complemento alimenticio óptimo, agrega.
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Las vitaminas D, C y minerales ¬como fósforo, hierro y potasio¬ son también componentes del champiñón que, según Estrella, refuerzan el sistema inmunológico y evitan enfermedades como el Alzheimer y el Parkinson.
Además de esas propiedades benéficas, estudios señalan el champiñón posee antioxidantes, componentes que impiden el daño a las células y puede incluso llegar a prevenir cánceres. Sobre esto, el especialista dice que “el champiñón tiene un mecanismo que impide el proceso de oxidación de células que causan los radicales libres, culpables de la aparición de estas enfermedades”.
En el mercado hay tres tipos reconocidos de este hongo comestible: el champiñón blanco, de tamaño mediano y al que se le atribuye prevenir la influenza; el portobelo, más grande, puede ser preparado a la plancha, y el shiitake, de color café, que es preparado en salsas.
La nutricionista Sonia Murillo Aguirre señala que la única prevención que se debe tener al consumir champiñones es que la persona no sea alérgica a este alimento.
