Ricardo Patiño anunció que viajará a Bruselas con Santiago León para continuar las negociaciones comerciales con la Unión Europea. Las negociaciones no están suspendidas, enfatizó.
El canciller dio un giro de 180 grados. Los cañonazos desde el Palacio de Nájera disparados por el artillero mayor, el viceministro de Relaciones Exteriores, Kintto Lucas, han hundido los esfuerzos del viceministro de Comercio, Francisco Rivadeneira, y del Ministerio Coordinador de la Producción para alcanzar un acuerdo.
Alto al fuego, Kintto Lucas.
La reacción oficial se produce inmediatamente después que la UE declarase cesadas las negociaciones, tras cuatro años frustrantes. Quito se separó del proceso que siguieron Lima y Bogotá, dentro del marco de la CAN, para alcanzar un TLC con Europa.
Quien llevaba la batuta de las negociaciones era la ministra Natalie Cely.
El último esfuerzo de la ministra de alcanzar un acuerdo fue abatido por Lucas. Mientras se negociaba en Bruselas, Lucas declaró para Prensa Latina que Europa busca acuerdos comerciales como una forma de neocolonialismo para ponerse a salvo de la crisis internacional.
Hoy Cely es embajadora en Washington e inferior jerárquica del viceministro Lucas.
Urge alcanzar un acuerdo porque la UE es nuestro mejor mercado. Compra el 30% de nuestras exportaciones no petroleras.
Sin acceso a la UE, el banano, camarón, atún y flores, entre otros, estarán en desventaja. Estos rubros son más de la mitad de nuestras exportaciones no petroleras.
En la UE las reglas están cambiando. Le ganamos la guerra del banano, y el arancel está bajando. Pero Colombia y otros competidores han firmado TLC y para ellos el arancel baja más rápidamente. Nuestro banano pagará más derechos que el colombiano para entrar a Europa, si no firmamos un acuerdo.
Para los otros productos mencionados, el Ecuador goza de preferencias SGP plus que no tienen, por ejemplo, los países asiáticos. El atún en conserva entra liberado, para envidia de los tailandeses, los mayores exportadores mundiales, quienes pagan un arancel elevado. Bangkok busca un acuerdo de comercio con Bruselas.
El SGP plus expira en 2013, y Europa ha decidido que la mayor parte de los países latinoamericanos ya están grandecitos. Que el acceso preferencial debe circunscribirse a los países pobres del mundo, en su mayor parte africanos.
Las preferencias las vamos a perder. Por lo que para mantener el acceso al mercado europeo, la única opción será un acuerdo comercial.
Las políticas del gobierno Correa han incidido negativamente en las exportaciones agrícolas y agroindustriales, un puntal de la economía costeña. Esto no se ha dado por incapacidad o desidia, sino porque las prioridades han sido otras. Entre ellas:
-Política internacional de buscar alianzas con países contestatarios del orden internacional; pero estos no compran nuestros productos.
-Política comercial proteccionista que sacrifica acceso de las exportaciones privadas al mercado.
-Política de producción que favorece los macroproyectos estatales y la miniproducción solidaria, cuando la producción agroexportable es de empresarios grandes, medianos o pequeños.
-Mayor formalidad y protección laboral con sueldos más altos y afiliación al IESS, importante objetivo social, pero que aumentó los costos del campo.
Bon voyage, Ricardo Patiño.
