Eran las 14:30 del pasado 6 de septiembre. A esa hora el custodio Juan Pedro Gómez controlaba la seguridad dentro de la agencia que el Banco Pichincha tiene en la feria ganadera de Santo Domingo. No había ni un policía, pese a que en el sitio mueven al menos 3 millones de dólares por semana. De pronto llegaron ocho delincuentes.