Príncipe Guillermo y Kate Middleton visitan el centro de estudios donde se conocieron

AFP
SAINT ANDREWS, Reino Unido.- El príncipe Guillermo y su prometida, Kate Middleton, regresaron este viernes a la Universidad de Saint Andrews, donde se conocieron hace 10 años, para inaugurar las celebraciones del 600 aniversario del prestigioso centro escocés ante miles de entusiastas.

La pareja, que se casará en Londres el 29 de abril, recibió una calurosa bienvenida de los miles de curiosos que salieron a las calles de la ciudad con ocasión de su primera visita oficial a Escocia, y respondió repartiendo sonrisas y apretones de mano.

Para su segunda aparición pública en dos días, Kate Middleton, de 29 años, eligió un traje de chaqueta y falda de un rojo brillante ceñido con un cinturón a juego con sus botas altas y sus guantes de color negro, mientras que el príncipe, de 28, lució un discreto traje azul marino.

La víspera, en su primer acto oficial conjunto, los futuros novios habían bautizado un barco de salvamento en Gales (oeste del Reino Unido), donde la pareja residirá después de la boda debido al trabajo del príncipe Guillermo como piloto de helicóptero de una unidad militar de búsqueda y rescate.

Esta vez el hijo del príncipe Carlos y de la difunta princesa Diana, segundo en la línea de sucesión al trono, estaba invitado a dar el pistoletazo de salida de las celebraciones del 600 aniversario de la Universidad.

"Es un momento muy especial para Catherine y para mí, es como volver a casa", dijo Guillermo antes unos 600 estudiantes, docentes y empleados de la Universidad, la tercera más antigua del mundo anglosajón.

Guillermo y Kate se conocieron en septiembre de 2001 en esa Universidad, donde ambos empezaron a estudiar Historia del Arte, aunque Guillermo terminó por licenciarse en Geografía. Su relación, sin embargo, no comenzó hasta 2003, aunque su noviazgo sufrió una breve interrupción en 2007.

Poco se sabe de la época que ambos pasaron en Saint Andrews porque el príncipe Carlos llegó a un acuerdo con la prensa para que respetaran la vida privada de su primogénito mientras estudiaba.