Mario Reyes,
Seattle, Washington, EE.UU..- Acabo de visitar mi ciudad natal Guayaquil y me asombró la amenaza de Correa de clausurar Teleamazonas y la amenaza de Camilo Samán de enjuiciar al periodista Emilio Palacio. Admiro la frontalidad y valentía con la que este último ha señalado los negociados, irregularidades y equivocaciones de este régimen.
Y es la pura verdad, este régimen es puro buche y pluma, todo se queda en ofertas demagógicas, y lo único y poco que han hecho fueron con los millones de dólares que les llegó de chiripazo por el alto precio del petróleo.
Pero el error del economista Correa fue pensar que la algazara duraría eternamente. Los precios se fueron abajo y ahora Correa quedó maniatado con el famoso bono de solidaridad y la promesa de dar pan, techo y empleo a la socialista del siglo XXI.
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Pero ahora no hay plata, así que hay que crear enemigos del régimen, y qué mejor que la prensa "oligarca y corrupta", qué mejor que los empresarios "explotadores y sinvergüenzas", qué mejor que los curas "hipócritas y de derecha", qué mejor que los maestros "vagos e ignorantes", qué mejor que los "pelucones de Samborondón".
Pero lo que no hace Correa es ver que el peor enemigo que tiene es el que le da las órdenes equivocadas desde Venezuela, y el círculo que está enquistado en el Palacio de Carondelet.
Por ello es hora de que el pueblo despierte.
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Mario Reyes,
Seattle, Washington, EE.UU.
