Con Manolo Picón en batería, Fabricio Rodríguez en bajo y Ángel Duarte en guitarra, el grupo Clinker se presentó como soporte para Carola Zerega y Lorna Lima que, con temeraria decisión, interpretaron a Janis Joplin, verdadero ícono de la contracultura americana de los sesenta y quizá la primera cantante blanca que se atrevió a decir que cantaba blues.
La primera en cantar fue Carola. Manejando los gritos que hicieron tan famosa a Janis, Carola demostró que su fuerte son los registros altos con potencia y bonito timbre de voz. Con acceso a la famosa película Monterrey pop hubiera tenido un gran espejo tanto en vocalización como en lenguaje corporal para Ball and chain, que dejó maravillados a todos en dicho festival.
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Con Try y Mercedes Benz Carola demostró que está lista para ser solista, y más aún, cuando logre relajarse, abandonar los nervios y disfrutar de cantar más relajada. Talento y voz tiene para largo.
En la segunda mitad salió a cantar Lorna Lima con muy bonita voz, más contenida y proyectando una vulnerabilidad necesaria para que los blues sean creíbles.
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En la charla, Ángel Duarte se olvidó de mencionar que cuando a Janis se le ocurrió cantar en un festival afroamericano los negros se burlaron de ella como blues-singer. La combinación de Carola y Lorna, agresividad y vulnerabilidad, es un buen resumen de Janis.