Música. Se dio a conocer como cantante de pop, luego de que  interpretó reggaetón y ahora dice que hace suyas las baladas.

Como una joven extremista que puede ser paciente y a la vez “fosforito”, así se describe la artista nacional Andrea Bucaram. Ella tiene 23 años, gusta del baile y en su carrera como solista (antes perteneció a la agrupación femenina Púrpura Gris) ha hecho suyos géneros como el pop, el reggaetón y la balada.

Según indica, los ritmos que le permitan bailar en el escenario son sus favoritos. Por ello, asegura, cuando en el 2005 empezó a promocionarse en el mercado discográfico lo hizo con el reggaetón Shh, shh... Nadie lo sabrá.

Publicidad

Le siguieron Baila, que también es un reggaetón; y Ven ven, de corte pop. Estas composiciones constan en su primera producción homónima, de la cual ahora da a conocer Abrázame.

En el contenido de esta canción, escrita por Francisco Rodríguez –quien además produjo el álbum–, Andrea reconoce que recuerda su pasada relación sentimental con Carlos José Matamoros (el Paparazzi).

Publicidad

“Francisco tenía otra letra para esa melodía, pero yo le pedí que la adaptara al momento que estaba viviendo. Entonces sentía mucha soledad. Para mí se juntaron las cosas porque antes de Carlos José viví otra relación que, asimismo, me dejó lastimada”, cuenta.

En Abrázame, Andrea pide que no suelten su mano y que su fe hacia el Creador no decaiga. “Ambos deseos son para Dios, a quien también suplico me dé fuerzas para evitar las tentaciones”.

Tras su relación con Matamoros, Andrea fue vinculada con Maximiliano, un modelo y futbolista argentino de quien ahora es amiga. De estas relaciones, la artista reconoce que aprendió “que nadie se muere por nadie y no hay seres indispensables”.

Por ahora, Andrea comenta estar felizmente sola y más alerta, “porque he estado a punto de amarrarme con alguien, pero descubro que anda con otra persona y me aparto. Eso significa que ya no soy tan ciega como antes”.

Volviendo a su actividad musical, Andrea dice que con sus canciones busca conquistar a los jóvenes e incluso a los niños. “Por eso las letras de los reggaetón que interpreto son ajenas a la temática sexual. Quiero que cuando los chicos se diviertan lo hagan con mis reggaetón, cuando estén románticos escuchen mis baladas y cuando quieran reflexionar lo hagan con mi pop, en cuyos temas recomiendo que no busquen huir de sus problemas con los vicios o las drogas”.