Valenzuela, quien dice escribir con el cuerpo, desde su condición de mujer, y que ha denunciado los horrores de la dictadura argentina sin caer en lo panfletario, hizo uso del humor cuando se le preguntó si se le había hecho difícil abrirse campo en la escritura teniendo una madre escritora y  qué consejo le daría a un escritor que comienza: “Primero no tener una madre escritora”, dijo, lo que provocó los aplausos del público.