El cometa McNaught, considerado el más brillante de las últimas cuatro décadas, será visible por el ojo humano sólo hasta este fin de semana, cuando su imagen comience a desvanecerse en el firmamento después que pudo ser observada a simple vista desde el Hemisferio Sur.
Bautizado como "gran cometa del 2007" por su intensa luminosidad, el McNaught seguirá su viaje alejándose del sol y, al cabo de los próximos tres o cuatro días sólo podrá ser visto a través de instrumentos ópticos.
"A simple vista se puede seguir viendo durante los próximos días, pero a contar de este fin de semana empezará a bajar el brillo y sólo podrá verse con binoculares o pequeños telescopios", señaló el astrónomo Luis Barrera, asesor del Planetario de la Universidad de Santiago de Chile.
El Observatorio Europeo Austral (ESO, por su nombre en inglés) informó en Chile que el cometa alcanzó su punto de mayor cercanía con el Sol -y consiguiente mayor luminosidad- el pasado 12 de enero. Desde ese día el cometa se aleja de esa estrella y va perdiendo su brillo.
El cuerpo celeste fue visible en el hemisferio norte desde fines del 2006 hasta comienzos de enero pero a contar de la segunda semana del mes su brillante y extensa cola sólo pudo observarse desde el Sur, precisó Barrera.
"Se vio muy claramente, era demasiado espectacular el efecto de su cola. Es un evento que hay que ver", enfatizó el astrónomo. "Mi sugerencia es que la gente siga mirando el cielo", insistió el científico.
"Después, el cometa seguirá su viaje por el Sistema Solar alejándose del Sol", explicó. Proveniente de los confines del sistema planetario en que se ubica la Tierra, el cometa probablemente nunca volverá a transitar cerca del Sol.
La imagen sobre el horizonte semeja una aurora. "La estructura de la cola es probablemente el resultado de la actividad reciente del cometa, liberando pequeñas partículas de polvo", precisó ESO.
El paso del McNaught puede observarse mirando hacia el oeste, durante la puesta del sol. El cometa se verá al sur del planeta Venus, el otro cuerpo brillante que destaca en el ocaso.
Descubierto en agosto de 2006 por Robert McNaught desde el Observatorio Siding Spring en Australia, es el más brillante que se observó desde la Tierra a contar de 1965.
Por superar en brillo a los cometas Hale-Bopp y West se le considera el Gran Cometa del 2007, señaló ESO.
El McNaught proviene de la lejana Nube de Oort, un cinturón de cometas distante a 1,5 años luz del Sol, en los límites del sistema solar, que es considerada la fuente de los cometas de larga duración o que tardan miles de años en volver a pasar cerca de esa estrella.
Este cometa, en todo caso, es uno "no periódico" o sea, pertenece a aquellos que son vistos sólo en una ocasión, explicó el astrónomo francés Olivier Marco.
"Eso significa que, si es que vuelven a pasar por la vecindad del Sol, lo harán en miles de años", explicó el astrónomo, asesor del Planetario de la universidad chilena.
Desde Chile, imágenes del cometa fueron recibidas en el telescopio de ESO en Cerro Paranal, al este de Antofagasta y 1.100 kilómetros al norte de Santiago. Otras fueron captadas en el balneario de Pucón y en la austral región de Tierra del Fuego, a más de 2.000 kilómetros de la capital chilena.