Joe Rosenthal, captó en 1945 a seis soldados de EE.UU. cuando colocaban la bandera en la isla de Iwo Jima.

El fotógrafo Joe Rosenthal, que tomó la histórica imagen en 1945 de seis soldados estadounidenses plantando la bandera en la isla japonesa de Iwo Jima, falleció a los 94 años de edad, informó ayer su hija Anne.

Rosenthal murió por causas naturales en la residencia geriátrica donde vivía en Novato, en las afueras de San Francisco. “Era un hombre bueno y honesto... de gran integridad”, dijo su hija.

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La imagen es una de las más difundidas de la Segunda Guerra Mundial y sirvió como diseño para el monumento de la Infantería de Marina inaugurado en 1954 en Arlington, a las afueras de Washington y cerca del cementerio militar.

Más de 6.800 soldados estadounidenses perecieron en los combates con las tropas japonesas por el control de esa isla ubicada a 1.200 kilómetros al sur de Tokio.

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La captura de la isla era importante para Estados Unidos, porque permitiría el uso de pistas para sus aviones bombarderos B-29.

La foto le ganó a Rosenthal un Premio Pulitzer y una encuesta llevada a cabo en 1999 por la Universidad de Nueva York, la clasificó con el número 68 en un listado de los 100 mejores ejemplos de fotografía periodística del siglo XX.

Unos 30.000 infantes de  Marina de EE.UU. desembarcaron en febrero de 1945 en la costa de Iwo Jima, defendida por unos 21.000 japoneses.
Durante los combates de cuatro días murieron todos los japoneses en una feroz resistencia a los invasores.

La foto que tomó Rosenthal muestra, en realidad, la segunda ocasión en que los soldados plantaron la bandera sobre el monte Suribachi. La primera vez que lo hicieron, los oficiales consideraron que la bandera era demasiado pequeña.

Rosenthal, quien entonces trabajaba para la agencia Associated Press, relató más tarde que dudó en ir a la cima cuando le dijeron que ya se había plantado la bandera estadounidense ahí, pero finalmente fue y encontró que los soldados se preparaban para levantar una segunda más grande.

Pero la toma no fue de una pose: los soldados estaban en lo suyo y Rosenthal levantó la cámara, enfocó y tomó la imagen que se transformaría en uno de los símbolos de la victoria estadounidense en la Segunda Guerra Mundial.