Una jueza de Lima ordenó ayer levantar el arresto domiciliario que pesaba desde hace tres años sobre la conductora de televisión Laura Bozzo, una de las estrellas de la cadena Telemundo, y dispuso que permaneciera bajo libertad restringida mientras dura el juicio en su contra.
Bozzo es procesada por haber recibido presuntamente unos tres millones de dólares de Vladimiro Montesinos, ex jefe de los servicios secretos, para favorecer la reelección presidencial del destituido primer mandatario Alberto Fujimori desde su talk show en un canal de televisión local en el año 2000.
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La animadora está al frente del programa ‘Laura en América’ en la cadena hispano norteamericana Telemundo, que se difunde en Estados Unidos, América Central y gran parte de Sudamérica. En los últimos tres años el espacio se difundía desde un set de televisión en Lima, donde cumplía su arresto.