De enero a mayo de este año, la CTG ha emitido 6.285 citaciones por exceso de velocidad a los conductores.

Jefferson Ayala atraviesa la Av. Pedro Menéndez Gilbert a 60 km/h, mientras los vehículos que van junto al suyo llegan a los 80 y 100 km/h, sin tomar en cuenta que el límite permitido es de 50 km/h, según el letrero colocado por la Comisión de Tránsito del Guayas (CTG) en la vía.

“La gente no respeta los límites de velocidad en ninguna parte. Todos corren porque no hay nadie quien controle”, dice Ayala.

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Luego ingresa en el túnel que sale a la calle Boyacá y solo ahí los conductores mantienen los 50 km/h permitidos y no se cambian de carril, porque en el viaducto hay cámaras de vigilancia y a la salida una patrulla de la CTG detiene a los infractores. 

Este Diario, el pasado viernes, realizó un recorrido por las avenidas Veinticinco de Julio, Quito, Machala, Nueve de Octubre, Pedro Menéndez Gilbert, Plaza Dañín, del Bombero, Marginal del Salado, Carlos Julio Arosemena, y las vías Perimetral y Samborondón, donde comprobó que la mayoría de los choferes irrespetan los límites de velocidad. Y, al menos ese día, no hubo quién controlara estas irregularidades, a pesar de que los letreros indican que se lo hace con radares.

Según las estadísticas de la CTG, en lo que va de este año se han emitido 6.285 citaciones por exceso de velocidad.

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Distribución de la velocidad
Pero llama la atención que dentro de una misma vía, como la Av. Veinticinco de Julio, el tope en unos tramos es de 50 km/h y cambia a 40 km/h al pie del Mall del Sur (a la subida del puente) y vuelve a ser de 50 km/h al bajar el paso.

Y a la entrada de la Perimetral baja a 40 km/h, luego sube a 50 y a la altura de Tres bocas los vehículos pesados deben circular a 90 mientras que los livianos, a 100 km/h.

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En la calle Tungurahua pasa lo mismo. En sus intersecciones con Vélez, Hurtado y Luque el tope es de 30 km/h; y desde Camilo Destruge en adelante es 40 km/h.

Este Diario intentó comunicarse con Roberto Pólit, director ejecutivo de la CTG, para conocer su versión sobre la distribución y control de las velocidades, pero no se obtuvo respuesta del funcionario.

Una fuente del departamento de Ingeniería de la CTG, que prefiere mantener su nombre en reserva, explicó que las vías se clasifican en: calles colectoras (vías de 4 carriles), arterias (de más de 4 carriles), arteria menor (vías que sirven para conexión y sin mayor flujo de carros) y calles de 2 a 4 carriles. De acuerdo con esto se dispone la velocidad para los distintos tipos de automotores. 

Según la Ley de Tránsito, en las zonas pobladas del perímetro urbano la velocidad límite es de 50 km/h para los carros livianos. En las zonas donde hay centros de estudio se debe conducir hasta a 35 km/h.

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Si bien el reglamento indica que los transportes urbanos de pasajeros deben circular a 40 km/h, en la Av. Quito el límite es de 50 km/h, pero estos corren a 70 km/h y más, según comprobó este Diario. Mientras que en la Av. Machala no hay letreros que establezcan esta norma.

SANCIONES

Según la Ley de Tránsito conducir un vehículo a una velocidad mayor o menor de la permitida es una contravención de tercera clase, cuya sanción es una multa equivalente al 30% del salario mínimo vital general, o sea de seis dólares. 

En los  accidentes por exceso de velocidad que causan muertes, la pena es de 3 a 5 años de prisión, se suspende la licencia por el mismo tiempo y la multa es de 8 a 40 salarios mínimos vitales. 

El reglamento señala que los buses urbanos deben circular a 70 km/h en vías perimetrales y a 90 km/h en las carreteras. Para los de carga pesada el límite es de 70 km/h. Los conductores deben disminuir la velocidad al llegar a escuelas, iglesias, estadios.