El ministro de Defensa de Colombia, Jorge Alberto Uribe, admitió este miércoles que el Gobierno de Bogotá pagó una recompensa por el líder guerrillero Rodrigo Granda, aunque no precisó ni el  monto ni el destinatario de esa recompensa. 
 
"Se ha pagado una suma por esta información que permitió el tener en Cúcuta  a este personaje, como se seguirá pagando, (pero) no se ha promovido en las  Fuerzas Públicas de otros países la búsqueda de estas personas en forma  irregular", indicó  Jorge Alberto Uribe. 
 
En declaraciones a la prensa, el ministro Uribe aclaró que las autoridades  de su país recibieron en diciembre pasado información sobre la presencia en  Venezuela de Granda por parte de "personas que no son identificables por  nosotros, ofreciendo hacer entrega o dar información que permitiera la captura  de este personaje". 
 
"Esa información fue analizada por los organismos competentes, se  consideraron suficientemente serias y se montaron los operativos respectivos  que dieron lugar a la captura de este personaje en Cúcuta", añadió Uribe que  dijo que su país no seguirá permitiendo que los rebeldes "se sigan moviendo con  demasiada libertad en el mundo internacional".

Según informa el diario colombiano El Tiempo, el presidente Álvaro Uribe sabía que al guerrillero de las Farc (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia)  lo capturaron en Venezuela. El Gobierno colombiano entonces activó el programa de recompensas y, como en tantos otros casos, decidió que, de ser cierta la información, se pagaría un monto. Y así fue.

¿Cómo de materializó la captura?, es el interrogante que aún no se resuelve.
Un primer indicio que conduciría a determinar qué miembros de las Fuerzas Armadas de Venezuela, junto con funcionarios de la inteligencia colombiana, participaron en la detención de Granda en Caracas parecía comenzar a revelarse ayer cuando el ministro de Defensa de ese país, general Jorge Luis García Carneiro, aseguró en rueda de prensa que se había abierto una investigación contra tres militares venezolanos.

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Curiosamente, horas más tarde, el mismo García Carneiro en el canal estatal rectificó y dijo que la investigación no se refería al caso del jefe guerrillero colombiano.

El propio presidente Uribe en diversas reuniones, una de ellas con congresistas, reconoció que Granda fue ubicado en Caracas y que tal y como lo ha afirmado en otras ocasiones su decisión es ir por los guerrilleros dónde estén.

En Caracas ayer el ministro García afirmó que su despacho había abierto investigación contra tres militares por su presunta participación en lo que en ciertos sectores se ha dado en llamar un "secuestro" y en otros una "captura ilegal".

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"Hay apertura de averiguación penal militar contra un teniente, un coronel y un mayor, donde se ha comprobado que, con oficiales colombianos, estaban haciendo inteligencia dentro del país", dijo García. Extraoficialmente se maneja la versión de que se trata de militares activos.

Lo extraño es que en la noche, el Ministro afirmó que la respuesta que dio en la conferencia de prensa no tenía relación con el caso del guerrillero colombiano.

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Por otra parte, el diputado del partido de gobierno y miembro de la comisión especial que investiga el caso, Luis Tascón, afirmó que un oficial colombiano "ofreció a cazarrecompensas venezolanos un millón y medio de dólares" y que el mismo oficial coordinó la operación, ordenó la captura y el posterior traslado de Granda a Cúcuta.

"No hay otra fuente de donde pudo haber venido el dinero, tuvo que haber sido del gobierno colombiano, que es el único interesado en aprehender a Granda. Claro, esa plata se entregó luego de una negociación previa, donde participaron funcionarios colombianos, por lo que la autoría intelectual del hecho estaría en funcionarios del gobierno colombiano", dijo.