“Es la mujer más importante de nuestra vida republicana en el siglo veinte y para el feminismo ecuatoriano es la pionera absoluta”.
La historiadora Jenny Estrada describe así a Matilde Hidalgo de Procel, la primera médica del Ecuador y sufragista del país y de América Latina.
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Pero eso no es todo. El calificativo ‘primero’ continúa al convertirse Matilde Hidalgo en la primera bachiller de Loja y mujer vicepresidenta de un Concejo Cantonal.
La admiración de Jenny Estrada hacia esta ecuatoriana la llevó a investigar más sobre ella. El resultado es el libro Matilde Hidalgo de Procel, una mujer total. Esta obra tiene seis ediciones. La última se presentará hoy, a las 17h30, en el Paraninfo de la Casona Universitaria. El análisis de la obra estará a cargo de Nila Velázquez.
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La historiadora empezó su investigación en 1979 y fue muy ardua. “Tuve que ir al lugar donde nació (Loja), transitar los caminos que caminó y buscar los documentos que me permitieran avalar esa trayectoria”.
La base de su investigación –comenta– fueron unos documentos que le entregó el hijo de Matilde, Fernando Procel. Pero hubo que ampliarlos, profundizarlos un poco más para darle vida al personaje, “lo cual para un biógrafo quiere decir casi corporizar la personalidad”, dice.
La autora se entregó completamente a esta tarea y asumió como propia la lucha de la primera bachiller del Ecuador.
Matilde Hidalgo de Procel, una mujer total fue el primer libro de Jenny Estrada. Ahora tiene 17 a su haber. Con la sexta edición de esta obra hecha por la editorial Santillana, Estrada alcanza una meta muy anhelada: llegar a los estudiantes y esto la llena de mucho orgullo.
El contenido de esta edición no ha variado, se encuentra intacto, pero no contiene el poemario de la ilustre mujer.
Y es que Matilde Hidalgo también fue poeta. “La vida de ella fue tan dura. Tuvo que vencer a la soledad, a la adversidad, por ser una mujer que rompía todos los esquemas y esa soledad se la entregó a la poesía”.
La historiadora siente una satisfacción de carácter espiritual e intelectual al ver su obra impresa. “Hoy siento que mi misión está cumplida, porque sabemos de quién se trata”.