La actriz Elizabeth Taylor padece una insuficiencia cardiaca y escoliosis, pero pese a ello no le teme a la muerte, según la revista estadounidense W.
“Si miras mi cuerpo en el espejo es completamente cóncavo. Me he convertido en una de esas pobres mujeres que se tuercen a los lados”, afirmó Taylor, de 72 años, considerada una de las mujeres más bellas de la historia del cine.