El Príncipe de Asturias aseguró este sábado que es "un hombre feliz" y que ha cumplido su deseo al haberse casado con Letizia Ortiz, "la mujer a la que amo", subrayó.
 
"No puedo ni quiero esconderlo, imagino que salta a la vista: Soy un hombre feliz. Y tengo la certeza de que esta condición me la da sentir la emoción de ver y protagonizar la realización de un deseo: Me he casado con la mujer que amo", dijo el heredero de la Corona española.
 
Ante 1.700 invitados en el banquete celebrado tras su boda en el Palacio Real de Madrid, Felipe de Borbón recordó que "conjugar la razón con la fuerza del amor y del sentimiento ha sido siempre un objetivo en mi vida".
 
"Por eso, estamos celebrando hoy que Letizia y yo unamos nuestras vidas en una comunión de amor, responsabilidad, trabajo, respeto y entrega mutua", añadió.
 
Tras recordar su educación en la lealtad al Rey de España y en el sentido del deber, indicó que se sentía "orgulloso de que Letizia se incorpore desde hoy a este proyecto con convicción y responsabilidad".
 
"Quiero que todos sepan lo agradecido que estoy a Letizia por su entrega y determinación a lo que dicho proyecto conlleva", agregó.
 
Felipe de Borbón recordó en sus palabras a las víctimas de los atentados terroristas del 11 de marzo en Madrid, al aludir a "los ausentes, a los que no les fue permitido criminal y brutalmente seguir viviendo sus ilusiones y desvelos", que junto con sus familias siempre estarán en su memoria.
 
El Príncipe de Asturias expresó su voluntad de seguir el ejemplo de los Reyes de España y su "compromiso permanente de que la Corona siga contribuyendo a la estabilidad institucional de España, a la integración y cohesión de los españoles y a ser garantía de su libertad y progreso".
 
Felipe de Borbón expresó, en su emotivo brindis, el "cariño y apoyo permanente" recibido de sus hermanas, las Infantas Elena y Cristina, y de su familia.
 
Pero sobre todas las muestras de cariño y agradecimiento, destacó el amor que siente hacia sus padres. "Es mucho lo que como hijo tengo que agradecerles" dijo, para añadir después que "no es posible entender mi felicidad sin la suya".
 
El afecto del heredero de la Corona española se dirigió asimismo a la familia de su esposa. "Hoy yo recibo dos padres, y dos hermanas más, y también cuatro abuelos" de los que, afirmó, recibe "el valioso aprendizaje de sus vidas".
 
También expresó su deseo de una felicidad duradera, de tener una familia y "alcanzar el necesario equilibrio entre lo público y lo privado" y lograr "hilar el tiempo político con el humano".
 
En ese sentido, recordó a su esposa que el conocimiento y respeto recíprocos les ha llevado hasta el matrimonio y expresó su seguridad de que ambos encontrarán el camino para compartir y disfrutar sus vidas en común. "Se que lo conseguiremos sin duda", aseguró.
 
"Hoy hemos sellado nuestro amor ante Dios y ante la sociedad; todos sois testigos de ello y de la autenticidad que nos mueve. Por eso estamos especialmente contentos de poder compartir con vosotros, con los madrileños y con todos los españoles este momento tan crucial en nuestras vidas", subrayó.