Holanda ultima los detalles para el funeral de la reina madre, la princesa Juliana, que se oficiará mañana, martes, en la catedral de la ciudad de Delft, donde se encuentra la cripta con el mausoleo de la Familia de Orange.
 
La princesa Juliana, madre de la reina Beatriz de Holanda, falleció el pasado 20 de marzo a la edad de 94 años a causa de una infección pulmonar.
 
Las portadas de prensa holandesa muestran este lunes fotos de la carroza que transportará los restos mortales de la soberana mientras anoche ensayaba la ruta que seguirá el cortejo fúnebre hasta la catedral de Delft.
 
Asistirán al funeral unos 1.800 invitados, entre los que se encuentran, además de los reyes de España, Juan Carlos y Sofía, los reyes Alberto II y Paola de Bélgica, la reina Margarita y el príncipe Enrique de Dinamarca, el príncipe Akishino y la princesa Kiko de Japón y la princesa Sarvath El Hassan de Jordania.
 
También estarán el príncipe Hans-Adam II de Liechtenstein, el conde Jean de Luxemburgo, el príncipe Moulay Rachid de Marruecos, el príncipe Alberto de Mónaco, el príncipe Haakon de Noruega, la princesa Maha Chakri Sirindhorn de Tailandia, el duque Edimburgo en representación de Reino Unido y los monarcas Carlos XVI y su esposa Silvia de Suecia.
 
Los reyes de España también asistirán tras la ceremonia a un almuerzo al que acudirán unas 300 personas.
 
Entre ellas figuran los miembros de las casas reales europeas, autoridades, familia y amigos personales de la princesa Juliana, según fuentes diplomáticas y de la Oficina de Información de la Casa Real (RVD).
 
Casi 9.000 militares participarán en el ceremonial y la mayoría de ellos (unos 6.000) presidirá la ruta de 13,2 kilómetros que seguirá la carroza con los restos mortales de la princesa Juliana, según las mismas fuentes.
 
La carroza fúnebre, decorada en blanco y violeta, estará guiada por ocho caballos frisios, como indica el protocolo.
 
A la cabeza, una escolta de honor de 19 militares a caballo guiará la carroza fúnebre, que estará seguida por otra carroza ocupada por la reina Beatriz y sus tres hermanas, las princesas Irene, Margarita y Cristina.
 
El esposo de la reina madre, el príncipe Bernardo, también acompañará al féretro en otra carroza en la que irá con cuatro nietos -los primogénitos de cada una de sus cuatro hijas-, entre ellos el príncipe heredero, Guillermo Alejandro.
 
El resto de la familia real viajará en coche hasta la catedral.
 
El cortejo fúnebre saldrá del Palacio Noordeinde (La Haya) en dirección el Instituto de Defensa, en donde se le sumará las carrozas con familiares y se completará el ceremonial militar.
 
Por petición de la princesa Juliana, la ceremonia será oficiada por una predicadora, Welmet Hudig-Semeijns de Vries van Doesburgh, que pertenece a una corriente -conocida en Holanda como "remonstrantes"- que se escindió de la Iglesia protestante en 1619.