Stan Laurel y Oliver Hardy, la pareja cómica de El Gordo y el Flaco, de procedencia y carácter opuestos, pasaron a la historia del celuloide como uno de los máximos exponentes de la comedia de los primeros años del cine, dice el escocés Simon Louvich en la biografía de los artistas.

El libro, titulado Stan & Olie. Las raíces de la comedia. La doble vida de Laurel y Hardy, publicado en España por T&B Editores, repasa la trayectoria de estos cómicos que pasaron sin dificultad la cruel barrera que supuso la irrupción del cine sonoro y constituyeron pareja artística durante más de un cuarto de siglo.

Fueron una pareja unida, sin grandes sobresaltos. Los años  treinta y cuarenta fueron su época gloriosa y cuando dejaron de llamarles para el cine, siguieron con sus giras teatrales, hasta que en 1957 falleció Hardy,  el Gordo. Laurel,  el flaco,  pasó sus últimos años en su casa de California y murió en 1965 de un ataque al corazón.

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