Antes de la desligadura

Guillermo Campuzano indica qué tipo de exámenes se le prescribe a una mujer antes de someterla a una desligadura:

Pruebas generales de sangre, papanicolau (para saber si hay células cancerosas), un electrocardiograma y una ecografía pélvica que identifique al útero y los ovarios.

Complementariamente una histerosalpingografía. Consiste en introducir un medio de contraste (sustancia que pinta) por la vagina que se dirige hasta la cavidad uterina y al sitio próximo de la ligadura en las trompas de Falopio. Los resultados de este examen se obtienen mediante el uso de una radiografía en la que se observa pintado el lugar de la obstrucción. Sin embargo, este examen es incompleto porque no permite observar cómo está el resto de la trompa en su interior y si hay adherencias por fuera.

También una laparoscopia diagnóstica, porque con este examen se observa el estado general de los órganos pélvicos. Así el especialista podrá decirle a la paciente si es posible o no recanalizar las trompas.

 Después de la operación
Héctor Vera señala los aspectos que se toman en cuenta después de la cirugía:

La mujer necesita un tratamiento con antibióticos y antiinflamatorios para disminuir los riesgos de una infección y mejorar los resultados de la cirugía.

Es preferible que se quede hospitalizada 24 horas.

A los ocho días de la desligadura se sacan los puntos.

Si la desligadura es por vía laparoscópica la recuperación de la paciente y su reintegración a la rutina normal es mucho más rápida, alrededor de cinco día. Y si es por microcirugía, entre 15 y 20 días.

Si después de la desligadura la trompa de Falopio quedó con algún defecto es factible que esta no permita el paso del óvulo fecundado y se quede detenido en éste, provocando un embarazo ectópico (fuera del útero incompatible con la vida), que puede romper la trompa y causar una hemorragia interna o intrapélvica.

Si la mujer se ha embarazado o tiene un atraso menstrual después de una desligadura se debe descartar un embarazo ectópico (que se produce fuera del útero) mediante una ecografía intravaginal y con el examen de sangre de la hormona gonadotrofina coriónica BHCG que se vuelve positiva con la presencia de un embarazo.

Cuándo embarazarse
Toda paciente que quiera ser sometida a una desligadura debe promediar el grupo de edad entre 30 y 35 años, ya que el factor ovárico (producción de óvulos) no se encuentra disminuido aún, no así en una mujer de 40 años en la cual las posibilidades de embarazo son menores por la disminución de su capacidad de ovular en forma frecuente.

Según Guillermo Campuzano el tiempo apropiado para intentar embarazarse es pasado los dos ciclos menstruales, porque en la primera menstruación normalmente hay un regreso de sangre menstrual a través de la trompa hacia la cavidad pélvica. Incluso porque la cicatrización, como en todos los tejidos, no es inmediata.

Sin embargo, Héctor Vera sostiene que el mejor momento es inmediato a la cirugía, ya que los mejores resultados, es decir, del 65%, se obtienen en los tres primeros meses posquirúrgicos.