Dormir mal no le dejará simplemente con cara de sueño. También se asocia con los accidentes cerebrovasculares (ACV) y con un menor suministro de sangre al corazón, según un estudio. Dormir mal incluye dormir demasiado poco o demasiado tiempo, tener dificultades para quedarse dormido y tener dificultades para seguir dormido, comentó el investigador Nobuo Sasaki.