“No esperen que la ceremonia inaugural de los Juegos de Río sea tan grandiosa como otras del pasado. Esperen más bien grandes sonrisas, representaciones pintorescas del bosque tropical y una celebración a la diversidad étnica del país sudamericano”. Así Marco Balich, el productor ejecutivo italiano, se abstuvo de revelar detalles antes del espectáculo de este viernes.“Este no será el espectáculo más grande”, dijo, aunque declinó especificar cuánto gastó. “Este no es un show opulento en comparación con Londres o Beijing, pero será una ceremonia muy emotiva, llena de emoción y muy elegante”.