Se utilizaban como caja fuerte para guardar pertenencias, joyas o documentos y su origen milenario se niega a desaparecer en manos de Víctor Quillupangui, tallador de bargueños, un mueble de origen hispanoárabe que se destaca por su variedad de compartimientos.
Quillupangui, oriundo de Machachi, desde pequeño observó cómo las arrugadas manos de su padre, Víctor, tallaban madera para perennizarla en los bargueños.
Publicidad
Su madre, Carmen Montatixe, nacida también en Machachi, participó silenciosamente del arte que se transmitió desde el bisabuelo de Víctor hasta él, quien ahora a sus 58 años luce satisfecho por el trabajo realizado, pero nostálgico por no comprender cómo el Estado no impulsa una escuela de formación de profesionales especializados en bargueños.
“Mis obras son patrimonio de los países iberoamericanos, pero se requiere un poco del apoyo de instituciones gubernamentales, municipales y la empresa privada para que se geste una escuela”, expresó mientras sus rústicas manos pasaban sobre una mesa labrada.
Publicidad
Quillupangui realizó una exposición de sus tallados entre el 16 y el 31 de octubre pasado, en la Casa de la Cultura Ecuatoriana, con el afán de difundir a la gente de esta generación el arte de elaborar un bargueño.
La muestra, de 25 piezas, exhibió el trabajo de hace 35 años, pues pulir cada una, dependiendo del tamaño y la complejidad, puede tardar entre 6 meses y ocho años.
Cada mueble es único; “en el mundo no existe copia alguna, se diseña de modo arquitectónico, luego artístico y finalmente la preparación de materiales” que le da el toque personalizado, relató Quillupangui.
Las piezas se crearon como instrumentos portables (tienen asas), que además de proteger el contenido del dueño servía de apoyo para la escritura.
Detalles
BARGUEÑOS.
Decoración
Los bargueños incluían adornos, como metales preciosos, pan de oro, madreperla y otros minerales y materiales, como huesos de res, conchas y joyas marinas.
Precio
Un bargueño puede costar entre 5 mil y 60 mil dólares.
Materia prima
La materia prima sigue siendo la madera: nogal, cedro, aliso y platuquero.