El afamado músico cubano Juan Formell, quien por más de cuatro décadas fue el alma de la legendaria orquesta 'Los Van Van', falleció el jueves, informó la televisión nacional. Tenía 71 años.

Un locutor del noticiero nocturno de televisión cubana dijo que su deceso fue "repentino", pero no ofreció detalles sobre el suceso ni sobre el destino de sus restos.

En noviembre del 2013, Formell recibió el Grammy Latino a la Excelencia, un galardón que se sumó a otro de la Academia en 1999 por el disco "Llegó...Van Van" y a varias nominaciones a lo largo de los años.

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"Mi vida ha estado enteramente consagrada a la música y solo cobra sentido cuando la gente la hace suya y la disfruta", expresó emocionado Formell cuando recibió la distinción el año pasado.

Nacido como Juan Clímaco Formell Cortina, el 2 de agosto de 1942, el músico fue una estrella de la salsa, el ritmo cubano que recorrió el mundo con su sabor y ritmo.

Flaco y de sonrisa fácil, Formell fue director, bajista, arreglista, compositor, cantante y productor discográfico.

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Los primeros pasos en la música los dio junto a su padre, Francisco que era flautista y pianista, y siguió luego de manera autodidacta.

De joven trabajó en diversas agrupaciones musicales de prestigio, como la de Guillermo Rubalcaba, la orquesta de Carlos Faxas y la de Revé en 1967, donde hizo verdadero aportes a la charanga, como el uso del bajo eléctrico y algunos teclados.

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A finales de 1969 creó 'Los Van Van', la más prestigiosa de las orquestas de la isla en cuatro décadas y que puso a bailar a cubanos y extranjeros con éxitos como "El baile del buey cansao", "Por encima del nivel", "Sandunguera", "La titimanía" o "La Habana no aguanta más".

Incorporó trombones y le sacó el máximo partido al rico son cubano para sacar la salsa.

Además, las letras de sus canciones se convirtieron en una crónica social de la isla, reflejando las alegrías y las preocupaciones de los cubanos con sentido del humor y picardía.

Formell también musicalizó poemas del poeta cubano Nicolás Guillén, hizo partituras para teatro y para el cine, como la película "Los pájaros tirándole a la escopeta", del realizador Rolando Díaz.

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