“Hollywood puede que valore la juventud por encima de todo, pero no hay nada más triste que una mujer mayor que intenta parecer más joven”. con esta lapidaria afirmación, la periodista Amanda Hess de la revista estadounidense Slate, arrancaba su reflexión sobre la ceremonia de los premios Óscar y el aspecto de algunas estrellas de más años que desfilaron por la alfombra roja.
Kim Novak (81 años) y Liza Minnelli (67) fueron el principal blanco de críticas. “¡Kim debería denunciar a su cirujano plástico!”, escribió en Twitter el millonario Donald Trump.
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Es solo un ejemplo de los comentarios que aparecieron en las redes sociales después de la gala, donde Novak, actriz que protagonizó la película Vértigo, de Alfred Hitchcock, presentó dos premios junto con Matthew McConaughey.
Las miradas de desaprobación también apuntaron a la actriz Liza Minnelli, a quien la propia presentadora de los óscar, Ellen DeGenneres, describió así: “Una de las mejores imitaciones de Liza Minnelli que he visto en mi vida”.
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Lo ocurrido desató un debate sobre el modo en que la industria trata a las estrellas obsesionadas por parecer más jóvenes en un entorno que venera la juventud. El actor John Travolta, de 60 años, también recibió comentarios negativos cuando subió al escenario.
Solo algunas estrellas se salvan, como Meryl Streep (64) y Sally Field (67), quienes están en el grupo exclusivo de mujeres que envejecen “con gracia”, comenta Amanda Hess.