Pese a que empezó con trabajos ocasionales en TV, Jennifer Lawrence, de 22 años, confió desde niña en su talento y supo que sería famosa. Así lo confesó en la edición de septiembre de la revista Vogue para EE.UU., que la tiene en su portada. “Era un bicho raro. Odiaba el recreo. No me gustaban los paseos. Y las fiestas me estresan”, dijo la ganadora de un Óscar.