A propósito de la noticia publicada el pasado miércoles, 3 de diciembre, sobre declaraciones del presidente Noboa, en el sentido de que desea realizar en Quito una “torre oncológica”, considero que es pertinente y oportuno recomendarle al primer mandatario que tal propósito constituiría un gasto no necesario, pues actualmente los pacientes que padecen de cáncer y que no tienen recursos económicos son atendidos eficientemente en Solca, núcleo de Quito, mediante el sistema de derivación en la atención médica desde hospitales o centros médicos del Ministerio de Salud.
Solca Quito es al momento un hospital que recibe recursos provenientes de un porcentaje del monto de los préstamos que se realizan en el sistema financiero del país y que cuenta con personal profesional altamente calificado, especializado en oncología, al mismo tiempo que tiene instalaciones y equipos de la más alta tecnología en las distintas especialidades.
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Hacer un nuevo hospital oncológico en Quito constituiría por lo tanto duplicar esfuerzos y asignar millones de dólares no necesarios para infraestructura, equipamiento y personal médico y administrativo, cuando ya existe en esta ciudad suficiente capacidad instalada.
Como sugerencia considero que los recursos financieros sean destinados en su lugar para construir y equipar una torre médica especializada en áreas que sí son necesarias para atender pacientes politraumatizados, atender enfermos con problemas cardiovasculares. (O)
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Juan Abel Pachano V., Quito