El pasado 31 de mayo se recordó el Día Mundial Sin Tabaco, para concientizar acerca de las consecuencias del tabaquismo en la salud.
A nivel mundial se estima que ocho millones de personas mueren al año por causas directa o indirectamente relacionadas con el tabaco y también con el cigarrillo electrónico o vapeador. Y por su parte, en Ecuador, se estima que el 2-16 % de las mujeres y el 16-38 % de los hombres son fumadores.
Los carcinógenos más potentes del tabaco son los HAP, las N-nitrosaminas, las aminas aromáticas, el acetaldehído y el isopreno, entre otras más de 400 sustancias tóxicas del humo de tabaco.
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El tabaquismo está fuertemente relacionado con una amplia gama de enfermedades, entre ellas el cáncer. Los cánceres más comunes asociados al consumo de tabaco son el cáncer de pulmón, seguido de los de boca, faringe, esófago, laringe, mama, vejiga, riñón, páncreas, hígado, estómago, colon, recto y cuello uterino. Además, también se ha asociado al tabaquismo con leucemia mieloide aguda.
El tabaquismo es la principal causa de cáncer de pulmón, responsable de la mayoría de los casos. El riesgo de desarrollar cáncer de pulmón es significativamente mayor en los fumadores que en los no fumadores.
Además, el tabaquismo aumenta el riesgo de cáncer en la boca, faringe, laringe y otros órganos de la cabeza y cuello.
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El tabaco es un factor de riesgo de primer orden para el cáncer de mama, pues incrementa hasta entre un 5 y 7 % la posibilidad de desarrollar la enfermedad entre las fumadoras.
Por otro lado, el tabaquismo también es una de las principales causas de cáncer de vejiga en el mundo occidental. Además, el tabaquismo es un factor de riesgo importante para la leucemia mieloide aguda.
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Es importante recordar que no hay un nivel seguro de consumo de tabaco. Incluso fumar pocos cigarrillos al día puede aumentar el riesgo de desarrollar estos cánceres y otras enfermedades. Dejar de fumar, independientemente de la edad o el tiempo que se haya fumado, reduce significativamente el riesgo de contraer cáncer y mejorar la salud en general, así que nunca es tarde para dejar de hacerlo. (O)
Francisco Plaza Bohórquez, analista de temas y políticas de salud, Guayaquil