Una gran tragedia estremeció al mundo: el terremoto en Siria y Turquía. ¿Quién estaba preparado para la furia de la naturaleza? ¿Alguien hubiera podido predecir lo que iba a suceder? Ni la ciencia ni la tecnológica pueden precisar día, hora, año, lugar, momento en que va a ocurrir un fenómeno natural. Solamente Dios sabe.

Dicha tragedia ocurrió mientras las personas dormían de madrugada, sin dar tiempo a pensar y reaccionar. Las búsquedas de familias entre los escombros las realizan héroes silenciosos; buscan a algún sobreviviente sin esperar reconocimientos; son todos, el pueblo, famosos, políticos, jóvenes, adultos, youtubers, ciudadanos, médicos, rescatistas, voluntarios, sobrevivientes, etc. (O)

Gladys Ortiz, universitaria, Guayaquil