Es evidente que nos encontramos en una crisis climática a nivel global, y a nivel nacional desde la fusión del Ministerio del Ambiente con la Senagua se ha visto deterioro en la gestión para salvaguardar los derechos de la naturaleza. Esta problemática debería ser uno de los temas claves en la agenda de los candidatos a la presidencia del Ecuador.

Lo que haga o deje de hacer el próximo presidente en sus cuatro años de mandato tendrá un impacto profundo en la capacidad de recuperar la institucionalidad del Ministerio de Ambiente y Agua (MAAE), así como lograr trazar una ruta para los ejes que el Ministerio maneja; no será fácil para quien lidere esto, ya que encontrará un Estado sin presupuesto, con poco personal y miles de trámites por agua como de gestión ambiental represados por años. El MAAE ha venido debilitándose y la austeridad vivida en el 2020 hizo que el problema se agudizara en conjunto con la inestabilidad en los mandos altos, que imposibilitaba trazar un norte para la institución y sus funcionarios. En el tiempo que queda de campaña es nuestro deber como ciudadanos exigir a los candidatos presidenciales que establezcan una clara estrategia para la gestión ambiental del Ecuador y la comuniquen en sus campañas, ya que nuestra naturaleza pende de un hilo. (O)

Isabel Tamariz Mata, avenida Samborondón