En cada rincón de nuestra patria hay jóvenes con energía, talento y ganas de cambiarlo todo. Somos nosotros quienes representamos la esperanza y fuerza para un verdadero cambio en nuestro país. Pero ese cambio no llegará solo con deseos o palabras, sino con preparación, con acción y valentía para enfrentar los miedos que muchas veces nos paralizan.
Ser joven es una oportunidad única, pero también un desafío. Muchos sentimos dudas: ¿y si no logro lo que sueño?, ¿y si fracaso? Esas preguntas son naturales, pero no pueden detener a quienes aspiran a ser protagonistas de su propia historia y del futuro del país.
Ecuador necesita jóvenes despiertos, que estudien, que trabajen, que se formen y que sirvan. No se trata solo de soñar, sino de actuar, de prepararse para enfrentar los retos con conocimiento y compromiso. Solo así podremos construir una sociedad más justa, próspera y solidaria.
Publicidad
No importa el miedo que tengas, porque ese miedo es parte del camino. Lo que importa es que lo enfrentes, que des el primer paso y que no te detengas. El país está esperando líderes, emprendedores, innovadores y servidores con corazón. El país te necesita a ti, joven, que decides prepararte aunque tengas dudas.
La verdadera transformación solo será posible si tú decides ser parte activa, te preparas y actúas con valentía. Jóvenes, el país los llama. Despierten, aunque tengan miedo. Porque el Ecuador que soñamos depende de nosotros. (O)
Jorge José Defaz Novillo, máster en Gestión de Proyectos, Milagro