La vicepresidencia del Ecuador ha tomado a cargo la salud pública del país para brindarle toda la asistencia posible. Tanto el MSP como el IESS se encuentran en el deber de prestar sus servicios de acuerdo a las competencias que se les ha asignado por ley, pero se están presentando serias falencias en las actividades que desarrollan estas instituciones del Estado.

La vicepresidencia no está tomando las debidas acciones para, por lo menos, estabilizar las cosas en lo referente a falta de medicinas, insumos, equipos de uso permanente como tomógrafos y otros importantes. La falta de estos elementos ocasiona retraso en la atención ciudadana y lo que sucede en hospitales como los del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social es la ocupación de camas por pacientes que esperan por exámenes, ecografías, radiografías, etc., y están ‘hospedados’ en habitaciones de dichas casas de salud hasta que se resuelva la situación anómala; esto bloquea el ingreso y la atención de nuevos pacientes, de tal manera que la asistencia médica que debe proporcionarse no fluye.

La falta de medicinas es permanente, no existe una real programación de provisiones y reposiciones inmediatas de medicinas y de insumos de alto consumo. Esto sucede en todos los hospitales del país. La vicepresidencia de la República debe, a través de canales diplomáticos, obtener la donación de medicinas de países de primer mundo, o establecer serios contratos con cláusulas, de precios preferenciales, por firmar con fabricantes directos. Si la vicepresidencia de la República tomó a cargo la salud pública del país, debe responder por todos los problemas que se están suscitando, aplicar correctivos con inteligencia; de lo contrario, renunciar, desde su primer personero, autodeclarándose ineficientes para manejar esta gestión tan importante. (O)

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Alejandro Sánchez Morán, ingeniero, Guayaquil