Esa afición de las personas de no abandonar el machete, para cortar cabezas a todo lo que se cruce, está a la orden del día en los foros digitales o redes sociales.

De sobra se sabe que, a veces, el moderador pone algo de orden en estas agresiones sistemáticas y las camufla. Entendería que estas personas se esconden detrás de falsos apodos, para desahogar su bajeza moral e intelectual, lo que los convierte en ruines y cobardes. (O)

Jesús Sánchez-Ajofrín Reverte, Albacete, España