Nunca será tarde ni suficiente corregir en las personas las malas costumbres como son: botar basura en las calles, las alcantarillas; escupir en el piso; estornudar sin taparse la boca; dar la mano y besar a sabiendas que está agripado; fumar en lugares no permitidos; consentir que las mascotas hagan las necesidades en las veredas y no recogerlas; escribir palabras obscenas en las paredes de los baños públicos; no respetar la fila de la tercera edad, etcétera.
En el aspecto vial: hablar por teléfono celular mientras se conduce; pitar si no es urgente la bocina de los buses, sonido estrepitoso que lastima el tímpano y pone a nuestros nervios de punta; estacionar los vehículos en la entrada de los garajes privados; ocupar el espacio reservado para las personas discapacitadas; hacer doble columna; detener el vehículo en media calle; no utilizar el paso de cebra y los puentes; pasarse la luz roja; dejar encendido el motor del carro, los gases producidos por la combustión de los motores de los vehículos afectan la salud y el medio ambiente.
Las malas costumbres en las salas de cine: las personas sin educación dan mal uso a los teléfonos celulares, durante la función se toman fotos, hablan, mantienen los artefactos prendidos; hay que agregar la bulla que hacen con las fundas de canguil y otros alimentos, para dejar los residuos regados en el piso.
O interferir con el sosiego de los espectadores del cine, es llevar a niños pequeños, lactantes, los que empiezan a llorar. El colmo del irrespeto se suscitó cuando asistí al cine con mi familia y unas jóvenes que se sentaron junto a nosotros se sacaron los zapatos; el mal olor fue tan fuerte que decidimos salir de la sala, no sin antes llamarles la atención.
De acuerdo con los antecedentes, ¿estaremos en capacidad de pregonar el buen vivir, de inspirar una imagen de credibilidad y de respeto?; según nuestras acciones, educación, seremos juzgados. Es tarea de todos contribuir al mejoramiento de nuestro comportamiento. (O)
José Castillo Celi, psicólogo y médico naturista, Guayaquil