A más de un año de la conflictividad de octubre del 2019, con el uso de fondos inyectados por los multilaterales en programas de ayuda social y deudas atrasadas, y el anuncio de la llegada de vacunas contra el COVID-19 a los diez meses de pandemia, el Gobierno ya no espera mayor conflictividad en los últimos cinco meses de mandato.