Entre las plantas cuyas propiedades combaten el estrés, un mal que puede desencadenar un sinnúmero de problemas de salud, están aquellas que contienen elementos que influyen en el sistema nervioso o vitamina C, considerada como el mejor antioxidante que existe, que refuerza el sistema inmunológico. Por ello se la utiliza en tratamientos contra el cáncer y en las enfermedades cardiovasculares, fundamental para mantener una buena visión, mejora la absorción del hierro y combate el estrés, según un artículo de la Revista Cubana de Plantas Medicinales, colgado en Google Scholar.

El artículo destaca los beneficios de la Fitoterapia: tratamiento de las enfermedades mediante plantas y sustancias vegetales. Entre la variedad de especies vegetales que pueden aportar al bienestar del cuerpo humano están las siguientes:

Una planta común, pero poderosa

Hierba Luisa. Foto: tomada del portal https://es.wikipedia.org/wiki/Cymbopogon_citratus.

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La planta conocida con el nombre de Hierba Luisa (Cymbopogon citratus) pertenece a la familia Poaceae, que logra alcanzar hasta 2 metros de alto, con hojas aromáticas entre 30 y 100 centímetros, ampliamente distribuida y usada alrededor del mundo en forma de decocción (cocer en agua) e infusión. Se la ha usado tradicionalmente para calmar cólicos y otras dolencias estomacales; así como para aliviar el estrés, los resfriados, fiebre, calmar el dolor y hasta para la artritis. También es utilizada ampliamente como a antioxidante, antibacteriano, y antiinflamatorio; así como para el tratamiento de la diabetes, malaria y ansiedad, se reseña en la publicación científica, el Efecto del aceite esencial de Cymbopogon citratus (DC.) Stapf “hierba luisa” en los niveles de ansiedad de estudiantes de educación secundaria.

Esta es una gran alternativa natural para calmar el estrés o ansiedad que se genera por la pandemia del COVID-19. La Organización Mundial de la Salud advirtió el mes pasado sobre los efectos de la emergencia sanitaria mundial sobre la salud mental.

La OMS considera probable "un aumento a largo plazo del número y la severidad de los problemas de salud mental".

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Un aliado muy cercano

Una extensión de un árbol de limón. Foto: Pixabay/balouriarajesh.

En las hojas del árbol de limón, al igual que en sus frutos, hay un sinnúmero de propiedades beneficiosas para la salud del ser humano. Un té con estas hojas ayuda a calmar la ansiedad en el individuo. En el artículo científico El limón y sus componentes bioactivos se destaca que el limón contiene flavanona hesperidina, un elemento natural que influye sobre la permeabilidad vascular, aumentando la resistencia capilar, con un efecto analgésico y antiinflamatorio, es también un efectivo antioxidante ya que captura los radicales libres del oxígeno, los cuales están implicados en la carcinogénesis (conjunto de fenómenos que determinan la aparición y desarrollo de un cáncer).

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Entre los consejos de la abuela

Flores de manzanilla. Foto: Pixabay/papazachariasa.

La Manzanilla (Chamaemelum nobile) también tiene propiedades que ayudan a reducir la tensión emocional en el cuerpo. “Las plantas contienen algunos compuestos que están presentes en sus extractos y actúan de forma similar a como lo hacen sustancias endógenas en el organismo, provocando sedación. En muchos casos actúan por un efecto sinérgico, es decir, combinado, de los diversos compuestos que están presentes”, explica Maite Rodríguez, académica de la Escuela de Química y Farmacia de la Universidad Andrés Bello, en Chile, reseña una publicación de esa institución chilena.

“Aunque se ha estudiado que la manzanilla contiene flavonoides y terpenos: apigenina y camazuleno, respectivamente, entre muchos otros compuestos, no le podemos atribuir a un solo fitoquímico los efectos ansiolítico y tranquilizante. Algunos estudios también muestran que eleva los niveles de glicina, un relajante a nivel del sistema nervioso central”, explica la experta.

Uso, no abuso

En una publicación de la Agencia Iberoamericana para la Difusión de la Ciencia y la Tecnología se cita al etnobotánico Agustín Contreras, invitado por la Escuela de Ciencias Ambientales de la Universidad Nacional de Costa Rica (UNA), quien sugiere no exceder las dosis recomendadas, pues el abuso puede provocar desequilibrios en el organismo. “La diferencia entre remedio y veneno está en la dosis que consumimos”, aseguró Contreras, en el artículo.

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Contreras recomienda, según la publicación, que las personas escuchen su cuerpo y sigan las indicaciones básicas para el consumo de plantas medicinales. “Lo importante es detectar los cambios sutiles que el cuerpo manifiesta, cuando se siente una mejoría y cuando se sobrepasa el uso”, insistió en las consecuencias de abusar de alguna sustancia.

Aquí también puede acceder al Manual del buen uso de plantas medicinales de la Universidad Agraria de Colombia, en el que encontrará una variedad de especies vegetales provechosas. (I)