Empresarios, vendedores informales, personas que vivían solas, dirigentes deportivos, músicos, periodistas, comerciantes, funcionarios públicos, profesionales en diversas ramas, choferes y más fallecen en estas semanas de crisis sanitaria.

Se van de un momento a otro, dejando su legado de trabajo en su comunidad, en el ámbito público o privado.

Desde el pasado martes 7 de abril, este Diario publica semblanzas de parte de las víctimas de esta pandemia y otras enfermedades. Guayaquil y el país pierden a grandes hombres y mujeres y sus familiares se hallan afligidos por su partida.

Esta es la cuarta entrega.

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Jorge Chica, médico y exfutbolista

La potencia y habilidad de Jorge “el doctor” Chica quedarán grabadas en la memoria de los aficionados de Barcelona Sporting Club.

El doctor neurocirujano, quien fue uno de los primeros futbolistas en combinar su carrera deportiva con los estudios universitarios de Medicina, falleció a inicios de este mes.

Durante siete temporadas tuvo destacadas jornadas como puntero izquierdo acompañado de compañeros como Víctor Ephanor, Juan Madruñero, Nelsinho y otros.

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Laboró en varios hospitales de Nueva Jersey y Guayaquil.

Robert Guevara, juez y catedrático

Robert Guevara Elizalde se desempeñó como presidente de la Tercera Sala de lo Penal de la Corte Superior de Guayaquil e impartió cátedra universitaria de las materias Derecho Penal y Criminología.

La Facultad de Jurisprudencia de la Universidad de Guayaquil, el Colegio de Abogados del Guayas y otros gremios de jurisconsultos rindieron homenaje al doctor que también fue líder del Instituto Latinoamericano de Derecho.

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Su colega Ítalo Vega y su hermana Raquel lo recordaron como un “litigante a carta cabal” y “un hombre con un inmenso corazón”, escribieron en redes sociales.

Freddy Pow Hing, galeno

El médico Freddy Pow Hing brindaba servicio en su rama de cardiología a los pacientes que acudían al hospital del IESS de Durán y en la red de dispensarios médicos de la arquidiócesis de Guayaquil.

La Sociedad Ecuatoriana de Cardiología, al igual que colegas y amigos expresaron su profunda consternación por su partida a fines de marzo pasado. “Él fue quien me atendió por asuntos de la presión arterial.

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"Gracias a Dios y a él mejoré mucho mi salud”, contó Paúl Ruata, uno de sus pacientes sobre el médico que gustaba de dar charlas científicas.

Vicente Navarrete, abogado empresarial

Un hombre de familia con visión cristiana y social era parte de la carta de presentación de Vicente Salomón Navarrete Luque, fallecido a fines de marzo.

En una carta publicada por este Diario, el abogado consideraba que los padres debían adoptar el rol de guiar a sus hijos para mejorar esta sociedad.

El abogado empresarial trabajó desde los 19 años en el estudio jurídico de su padre y se especializó en banca y finanzas, arbitraje y mediación y gestión política y social.

La Facultad de Jurisprudencia de la U. de Guayaquil lamentó el deceso del también catedrático.

Manuel Adolfo Varas, abogado y comentarista deportivo

El programa Los comentaristas, liderado por Mario Canessa, fue la última tribuna donde el abogado Manuel Adolfo Varas compartió sus comentarios sobre el fútbol y sus anécdotas de vida.

La voz espontánea del abogado se apagó el lunes 30 de marzo.

Varas siempre estuvo ligado al deporte, en su juventud integró el club 9 de Octubre y el equipo de básquet del Aguirre Abad.

Sus colegas lo recordaron por su espíritu alegre y añadieron que seguramente fue al reencuentro con su amigo José María Andrade, fallecido en el 2017.

Pedro Vacacela, médico

Ser doctor no es una profesión, es una vocación, era una de las frases compartidas por Pedro Vacacela Rea para sus colegas.

El galeno era líder de la clínica del día Génesis, que durante más de 15 años atiende a pacientes del sector de Bastión Popular, noroeste de Guayaquil.

El especialista en medicina estética y regenerativa junto a su equipo brindó servicios de consultas en general y en especialidades como cirugía. “Gran amigo, líder combativo, padre, esposo, profesional médico, solidario, humanista”, lo describió Juan Quimiz, quien le agradeció a nombre de los vecinos del barrio. (I)