Muchos ya no cuentan con recursos económicos para seguir subsistiendo, a otros, pese a tener algo de dinero, les es casi imposible conseguir un sitio donde hospedarse. También está quien requiere de una cirugía lo más pronto posible y más personas que temen por su salud porque se les terminó su medicina.

Son solo algunas de las situaciones por las que atraviesan compatriotas ecuatorianos que se encuentran en Argentina y que, debido al cierre de operaciones aéreas y fronteras por el coronavirus, no han podido volver al Ecuador.

Varios de los afectados han creado un grupo de WhatsApp para mantenerse informados y ayudarse hasta encontrar una solución. Grace de la Torre, quien reside en Quito, es una de las administradoras del grupo e indica que, aunque en este están unas 100 personas, tienen el registro de al menos 130 con dificultades para volver al país desde Argentina; entre ellos, cuatro menores de edad que viajan con sus padres y cuatro adultos mayores.

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Uno de los casos más graves que hay en este grupo es el de María Augusta Pinto, de Ambato, quien viajó a Buenos Aires junto con su esposo. Viajó para someterse a exámenes médicos ya que padece linfoma de Hodgkin. Los resultados de las pruebas indican que requiere urgentemente una cirugía. "Realmente acá para nosotros el tiempo apremia, venimos por cinco días, pensamos regresar el 19 (de marzo), llevamos más de 12 días acá sin dinero, echados de los hoteles. Nos sacaron del hotel a las 11 de la noche sin saber a dónde ir y con la incertidumbre, que es peor, de no saber cuándo vamos a poder regresar a nuestro país", expresa.

Como ellos, muchos otros temen que su salud se deteriore por la falta de medicamentos. Ulises Alvarado, de Guayaquil, salió el 13 de marzo pasado de Ecuador con la finalidad de volver el 19. Tenía planes de dejar instalado en Buenos Aires a su hijo quien empezará a estudiar allí. Dado que lleva más días de los planificados, se le está terminando el dinero y ya no cuenta con la medicina que debe tomar porque sufre de diabetes.

La misma preocupación la comparte Mayte Salgado, quien viajó hacia ese país con su madre, una persona de la tercera edad, quien también se ha quedado sin los medicamentos que necesita. Debido a las restricciones de movilidad en ese país y por temor a infectarse no ha podido salir a comprarlos.

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Otros, como Manuel Cueva quien padece hipertensión arterial y problemas cardiacos. También está quien sufre rinitis crónica y se le ha dificultado hallar un sitio donde alojarse. "Cada día es más complicado", manifiesta. Él prefiere no revelar su nombre para no preocupar más a su familia en Ecuador.

El tema del alojamiento es otro inconveniente que afecta enormemente a los compatriotas, no solo por la falta de dinero sino porque en los hoteles no los quieren recibir, ya sea porque son extranjeros o porque temen a que estén contagiados. En el chat que formaron comparten información sobre sitios dónde quedarse y, por la gravedad de la situación y la falta de dinero, hasta lanzan ideas como la de alquilar una gran casa entre varios para dividirse los gastos.

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"Estoy solo, estoy alquilando un departamento porque los hoteles no podían recibirme, estuve como una noche entera buscando un hotel", señala Diego Enríquez, quien es de la ciudad de San Gabriel, provincia de Carchi. Su preocupación es mayor porque en el caso de que haya un vuelo humanitario o algún tipo de ayuda para volver, cree que este partirá desde Buenos Aires, pero él se encuentra en la provincia San Juan dado que la restricción de movilidad no le permitió llegar a la capital.

Entre los más de 130 ecuatorianos también se encuentran varios médicos, quienes desean volver al país para aportar con su ayuda y conocimientos en esta crisis sanitaria. "Somos alrededor, de los que tengo ubicados, unos 15 médicos que estamos varados aquí. La economía se nos está acabando. Aquí en Argentina ha sido muy difícil puesto que a los ecuatorianos los sacaron botando de hoteles por el riesgo del contagio, que somos extranjeros... la crisis no es solo económica, es física y psicológica. (...) A los médicos nos necesitan en nuestro lugar de trabajo, porque somos nosotros quienes estamos en la primera línea de batalla", afirma Fernanda Ramón, quien reside en Cuenca y trabaja en el hospital Vicente Corral Moscoso.

Hay gran incertidumbre y molestia por no saber cuándo volverán, pero también temen que al llegar al país deban pagar hospedaje por 14 días en hoteles, lo que aseguran que solo agravaría la crítica situación económica por la que muchos ya están atravesando.

Su angustia por este tema se incrementó luego de conocer los testimonios de compatriotas que volvieron de México a Ecuador, quienes manifestaban que debían pagar altas sumas de dinero para acogerse al aislamiento que se pide a quienes llegan del exterior.

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"No creo yo que la mayoría que estamos en este grupo tengamos dinero para pagar un chárter y más aún llegar a nuestra patria a pagar un hotel de $45 diarios, al menos yo no lo tengo", señala Victoria Vivero, otra de las afectadas.

El mismo criterio lo comparte Grace de la Torre. "He visto muchísimos casos de personas que ya no tienen dinero para mantenerse en la ciudad de Buenos aires. Muchas personas están en provincias, en Mendoza, La Plata, y también están gastando muchísimo, no tienen para regresar ni siquiera hasta Buenos Aires y nos preocupa mucho que hemos visto en la noticias que la gente que está regresando no tiene opción de irse a su casa, tiene que irse a guardar cuarentena en un hotel que designa el Gobierno. Nos preocupa eso sobremanera porque esos hoteles con caros, ya estamos súper gastados, cómo vamos a hacer para pagar un hotel y comida durante 14 días, me parece terrible".

El propósito de todos los compatriotas es volver al país, ya sea a través de un vuelo humanitario o que se les permita utilizar los boletos de regreso que habían adquirido, por lo que hacen también un llamado de atención a las aerolíneas para que estas les permitan hacer uso de los pasajes que ellos ya han pagado.

Pese a ser un grupo de personas nunca se han visto personalmente, los une la misma situación negativa y el pertenecer a un mismo país, por lo que aunque la mayoría de los mensajes que comparten en el grupo de WhatsApp son informativos, no faltan los que apelan a la calma o los que animan a los que, con el paso se los días, van siendo atrapados por la desesperación. (I)