"El problema del Premio Nobel es que siempre se otorga a científicos de más edad, lo que da la impresión a la gente de que la investigación es realizada por personas mayores", dice a la AFP uno de los tres ganadores del Premio Nobel de Medicina 2019, el estadounidense Gregg Semenza. "Pero no es el caso: éramos jóvenes cuando hicimos nuestros descubrimientos".