Autoridades mexicanas detuvieron este lunes a cerca de 500 migrantes indocumentados, casi todos centroamericanos, en dos operativos en el sureño estado de Chiapas, fronterizo con Guatemala, informaron la fiscalía general y el Instituto Nacional de Migración (INM).

El grupo más numeroso, conformado por 181 adultos y 157 menores de edad -entre ellos, hondureños, guatemaltecos, salvadoreños, nicaragüenses y un cubano-, viajaba a bordo de cinco autobuses por un camino sin pavimentar de la zona centro del estado.

Las personas indocumentadas iban custodiadas por 15 individuos que viajaban a bordo de tres vehículos particulares y que portaban teléfonos celulares, tres radios de comunicación y una computadora portátil, precisó la fiscalía en un comunicado.

Publicidad

En tanto, otros 150 migrantes fueron detenidos por agentes del INM mientras caminaban en caravana por una carretera cercana a la ciudad fronteriza de Tapachula, en el sur del estado.

Los migrantes forman parte de un grupo que había ingresado ilegalmente la noche del domingo por el puente internacional Rodolfo Robles, que une a México y Guatemala, donde tres de ellos -dos hondureñas y un salvadoreño- fueron arrollados por un vehículo que los dejó gravemente heridos, informaron autoridades.

Ambos operativos ocurren luego de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, amenazara con cerrar su frontera sur acusando a México de no hacer nada para frenar la migración ilegal.

Publicidad

En respuesta, el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, ha dicho que sí atiende el tema migratorio y que la mejor forma de enfrentarlo es generar oportunidades de empleo en el sur de México y en Centroamérica.

Autoridades consulares de Guatemala en el municipio chiapaneco de Comitán interpusieron la semana pasada una queja ante el ombudsman mexicano por violación de las garantías individuales de sus connacionales, que según dijeron son detenidos ilegalmente por autoridades no competentes.

Publicidad

La ley mexicana señala que solo personal migratorio puede detener a los extranjeros que no cuenten con documentación que acredite su estancia legal en el país.

En tanto, representantes en Chiapas del gremio empresarial mexicano Coparmex denunciaron que el estado se halla indefenso ante el creciente arribo de caravanas de migrantes que, aseguran, afectan el comercio y el turismo y han provocado problemas de seguridad pública.

Desde octubre pasado, miles de centroamericanos han recorrido México en multitudinarias caravanas con la esperanza de llegar a Estados Unidos para pedir refugio alegando que escapan de la violencia y la pobreza en sus países. (I)