“Si tengo que pedir disculpas por utilizar la tarjeta magnética (de Carmen Alvarado), para trabajar lo acepto, pero en ningún momento ha sido por causar un perjuicio al Estado”, lo dijo entre lágrimas la asambleísta, Ana Galarza (CREO), investigada por la comisión tripartida acusada de supuesto delito de concusión, enriquecimiento ilícito y uso doloso de documento falso.