En la segunda sesión de comparecencias, Juan Francisco Sevilla, esposo de la legisladora Ana Galarza (CREO), admitió ante la Comisión Tripartita que la investiga, que él sí usaba la tarjeta magnética de la asesora Carmen Alvarado para acceder al edificio de la Asamblea.

Galarza es indagada por pedido de su colega Ronny Aleada (antes de AP), quien recogió la denuncia hecha ante la Fiscalía por Lenin Rodríguez, exasesor de la acusada, por los supuestos delitos de concusión, enriquecimiento ilícito y uso doloso de documento falso.

Los asesores Carmen Alvarado y su esposo, Omar Mayorga, así como el asistente Marcelo Rosero, en su testimonio, negaron que Galarza exigiera diezmos o que se repartían su sueldo con su esposo.

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Pero en la comparecencia, hubo contradicciones entre lo que afirmaron Alvarado y el esposo de Galarza; la primera dijo que ella viene cada semana a la Asamblea hasta tres meses; en tanto que Sevilla aseveró que Alvarado máximo asiste tres veces al mes al despacho de la legisladora.

Sevilla narró que en el 2016 quebró su empresa automotriz, y empezó a vivir de la tarjeta de crédito, y cuando se planteó la candidatura a su esposa, trabajó de lleno en ese propósito, y que fue el quien armó el equipo de asesores que hasta ahora acompaña a Galarza.

Aseguró que hicieron una campaña de desprestigio en su contra sobre supuestos juicios por estafa, pero que están desvirtuados, y que por eso no ha podido encontrar trabajo.

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Agregó que acompaña diariamente a su esposa en la Asamblea, y que “tal vez es un error usar la tarjeta de Carmen Alvarado, que es la asesora, para entrar” al despacho.

Contó que sus deudas de las tarjetas las paga con el dinero personal de su esposa; que al momento le ha girado 32 cheques que suman $ 32.079.

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“Mi mujer me ayuda mensualmente para seguir cumpliendo mis obligaciones financieras”, dijo. (I)