La Organización Mundial de la Salud (OMS) determina que cada año se suicidan casi un millón de personas, lo que supone una tasa de mortalidad de 16 por 100 mil habitantes, o una muerte cada 40 segundos.

En Ecuador, al menos 50 ciudadanos se han quitado la vida en lo que va del año, según datos de la Dirección Nacional de Delitos Contra la Vida, Muertes Violentas, Desapariciones, Extorsión y Secuestros.

Tungurahua es una provincia con alto índice. El área de Salud Mental del Distrito de Salud 18 D01, con sede en Ambato, contabilizó 35 suicidios en el primer semestre del 2018.

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Hoy, en el Día Mundial de la Prevención del Suicidio, el Instituto de Neurociencias ofrece en Guayaquil, a las 11:00, la charla gratuita ‘Espectro de la conducta suicida y factores de riesgos’, en sus instalaciones de la avenida Pedro Menéndez Gilbert, antes del túnel del cerro del Carmen.

Victoria Silva, jefa del área de Vida, señaló que son múltiples las causas que producen una depresión que orientan al suicidio.

Respecto a esta problemática, la OMS señala que el 20% de los suicidios se consuman por autointoxicación con sustancias venenosas como plaguicidas, y que la mayoría se registra en zonas rurales agrícolas “de países de ingresos bajos y medianos”. También consta el ahorcamiento y el uso de armas de fuego.

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Violencia intrafamiliar, conflictos sentimentales, falta de dinero, sensación de aislamiento y trastornos como la depresión y el consumo del alcohol tienen incidencia en suicidios, según la OMS y señaló que es la segunda causa principal de muerte entre personas de 15 y 29 años.

Las autoridades de Salud de Tungurahua, también de la Policía, han ofrecido charlas en varios cantones. En Ambato la semana pasada se realizó el foro de salud mental ‘Quien te pide ayuda’, para dar a conocer la importancia del tratamiento médico, así como del trabajo con la familia para evitar el aumento de casos.

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Óscar Pérez, del área de Salud Mental de esa provincia, dijo que la principal estrategia es la prevención y “no trabajar cuando se presenta el problema”. Refirió que existen equipos multidisciplinarios para intervenir a los pacientes que han intentado quitarse la vida. (I)