El veto parcial del presidente Lenín Moreno a la Ley de Fomento Productivo incorporaría cambios en al menos dos aristas: tanto en los incentivos como en las reglas macrofiscales. Así lo explicó ayer el ministro de Economía y Finanzas, Richard Martínez, a través de una entrevista radial. Confirmó que el texto está listo para ser enviado a la Asamblea, aunque no precisó si se lo haría ayer por la tarde u hoy en la mañana.

En todo caso, Martínez explicó que el tema de los incentivos a la inversión se ha atado a una condición de generar mayor empleo, que es lo que al final del día se busca. En cuanto a la regla macrofiscal, sostuvo que se están haciendo ajustes dentro del periodo de transición de tres años, en el que se plantea eliminar el techo de deuda del 40%, pero que sí se obligue al Gobierno a anular el déficit primario.

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Explicó que se ha incluido una disposición que permita tomar correctivos en caso de que haya catástrofes naturales o recesión económica grave que impida llegar al objetivo de anular dicho déficit. También se ha incluido una disposición en la que se establece que no se puede obligar al Estado a cargar más esfuerzo y por otro lado exigirle equilibrio fiscal. “No se puede seguir presionando a la caja fiscal”, insistió.

Por su parte, Daniel Legarda, representante de Expoflores, hizo un llamado a los sectores políticos para dejar de lado posiciones ideológicas y procurar la aprobación de la nueva ley lo más pronto posible. Señaló que tras varios años de un irresponsable manejo de la economía no se puede esperar que no haya efectos negativos. Por ello, es importante que se apruebe la ley que atraerá la inversión y generará mayor empleo.

Explicó que de lo que se conoce habría personas dentro del Gobierno que quieren seguir impulsando la agenda del anterior régimen, y ya no es momento para ello. Para Legarda, el tiempo apremia, pues tras la aprobación de la ley, también deberá pasar un tiempo para establecer la normativa secundaria correspondiente. (I)