Moradores de las ciudadelas Guayacanes, Brisas del Río, El Limonal, Samanes y Sauces se reunieron ayer con representantes de Interagua para exigir una solución ante los malos olores provenientes de las piscinas de oxidación que tienen al otro lado de la autopista Narcisa de Jesús, en el norte de la urbe.

El problema no es nuevo. Dijeron que llevan más de 10 años aguantando la fetidez que se empeora en los días soleados. Vecinos indicaron que en los últimos 5 años la situación ha empeorado.

Escucharon la explicación técnica de la responsable de operaciones de sistemas de tratamiento, Ángela Castaño y de la gerente de comunicación, Ilfn Florsheim, sobre las medidas tomadas para mitigar los olores y respecto a la construcción de una nueva planta, la cual está diseñada.

Publicidad

Florsheim aseguró que se está buscando el financiamiento de $ 250 millones y que a mediados del 2019 empezaría la construcción que duraría de 2 a 3 años. Para este proyecto se han hecho estudios desde el 2010 por $ 8 millones.

Los moradores dijeron no poder esperar más, pues aseguraron que su salud está siendo afectada. Leana Miranda, quien vive en Guayacanes (frente a las piscinas), sostuvo que debe medicarse para las alergias y usar colirios constantemente porque el olor es tan fuerte que los ojos se resecan. Wellington Villato, su vecino, manifestó que su casa huele tan mal que no puede llevar visitas y que incluso joyas, llaves de agua y chapas se vuelven negras.(I)