El Ministerio del Ambiente detectó varios incumplimientos ambientales de la empresa minera ECSA (Ecuacorriente) que maneja el proyecto Mirador, durante el 2017. Lo hizo dentro de las inspecciones mensuales de control y seguimiento.

Entre las observaciones constan una inadecuada apertura de accesos (remoción de suelo), falta de estabilización y revegetación de taludes (deslizamiento de suelos), e incorrecto sistema de sedimentación. También se encontraron deficiencias en la apertura de accesos y construcción de escombreras, sin contar con los permisos ambientales.

Según el ministerio hubo un inadecuado manejo de desechos sólidos y líquidos de los campamentos y de las obras en ejecución, así como un incorrecto manejo y almacenamiento de combustibles.

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Pese a estos hallazgos, que según el ministro del Ambiente, Tarsicio Granizo, no eran de gravedad y que pudieron ser solventados sin mayores inconvenientes, la empresa anunció que realizó una suspensión del 40% de sus acciones.

Esta decisión ha generado malestar entre la población de El Pangui, en Zamora Chinchipe. Ellos participaron ayer en una marcha pidiendo que el Gobierno apoye la reactivación del proyecto minero, enmarcado dentro de la minería responsable.

Entre tanto, ECSA aclaró ayer que la desvinculación de 1.000 personas y de volquetas que se conoció en estos días no se produjo en la empresa directamente sino en las contratistas y subcontratistas que trabajan en el proyecto. (I)