En su cuarto periodo como alcalde de Santa Isabel, Rodrigo Quezada adjudicó en $ 8,5 millones la construcción del centro comercial del cantón azuayo, oferta hecha en campaña.

El nuevo mall lo edificará la empresa pública Desarrollo Estratégico de la Universidad Laica Eloy Alfaro de Manabí, en un plazo de 300 días, según los documentos firmados por Quezada y en los que dispuso que el procurador síndico, Luis Ortiz, elabore el respectivo contrato.

La millonaria adjudicación se hará, según el alcalde, con un crédito sin intereses y se pagarán $ 160 mil al mes por tres años. En el centro comercial, trabajarán 1.400 familias que hoy laboran en el mercado.

Publicidad

Quezada aseguró que el proyecto tiene la aprobación del Concejo Cantonal y que planea inaugurarlo en el 2019. No obstante, ediles consultados señalaron que el monto inicial de la obra era de $ 6,5 millones y que el sitio donde se creará el nuevo mall “aún no tiene escrituras”.

Además cuestionaron que mientras el Municipio mantiene una deuda de $ 3 millones por diferentes obras y proyectos, al mismo tiempo adquiere nuevos compromisos.

En esa deuda se incluye $ 650 mil por el servicio de recolección de basura que el Cabildo no ha pagado desde hace cuatro años a la Empresa Pública Municipal Mancomunada de Aseo Integral de la Cuenca del Jubones (Emmaicj), creada en el 2012 e integrada por Santa Isabel, que tiene unos 20 mil habitantes, y otros tres cantones: Nabón, Girón y San Fernando.

Publicidad

No obstante, Quezada indicó que no le debe dinero a la Emmaicj y, por el contrario, pide que se le reconozca la inversión hecha como fundador de la mancomunidad, esto es $2 millones por la construcción de un canal de riego, una vía de lastre y la consecución del terreno de 80 hectáreas, donado por una cooperativa.

“Si cruzan cuentas más bien nos quedan debiendo”, insiste Quezada y reconoce que la deuda se generó cuando él fue destituido del cargo durante seis meses, en el año 2011.

Publicidad

Pero el vicealcalde de Santa Isabel, Efrén León, afirmó que desde el 2015 el Concejo Cantonal aprobó dentro del presupuesto municipal el pago de la deuda a la mancomunidad.

En el presupuesto del 2017 no consta ese pago y en el 2016 se señala una asignación inicial de $ 336 mil, de lo cual, según los documentos, se canceló $ 13 mil. De años anteriores no hay detalles en el portal web, como obliga la Ley de Transparencia y Acceso a la Información.

El Municipio de Santa Isabel subsidia el 70% del pago por la recolección de basura, por lo que los usuarios no pagan la tarifa real de $ 3,80 sino $ 1,40.

Marco Peña, presidente de la Emmaicj, calificó la deuda como un desacato a la ordenanza. Los $ 650 mil corresponden al subsidio a los ciudadanos.

Publicidad

Peña señaló que no se han sustentado con facturas las inversiones realizadas por Quezada y agregó que las cosas no pueden hacerse “a la voz del carnaval”, porque hay temas legales con la Contraloría.

Estaba prevista una reunión y si no se logra un acuerdo Quezada advirtió con la disolución de la mancomunidad.

Peña refutó que no es tan fácil la disolución, porque, según la ordenanza, cuando un municipio se separa deja todos los bienes, debe cubrir las deudas y los aportes de los meses que restan del año fiscal. Además, el Concejo Cantonal debe aprobar la salida, agregó el vicealcalde, y aseguró que los cinco ediles apoyan mantenerse en la mancomunidad creada. León indicó esta semana que por la presión del concejo el alcalde habría admitido la deuda. (I)

1,40
dólares
Es el costo que pagan los ciudadanos de Santa Isabel por el servicio de aseo y recolección de basura.

No debemos nada, exigimos que se reconozcan nuestras inversiones, somos los fundadores de la mancomunidad. A veces la gente es ingrata.Rodrigo Quezada, alcalde