Gilbert Alcívar habla con vehemencia sobre las fiestas del Niño Caracol, una actividad enraizada en varios lugares de Manabí, pero sobre todo en el sitio La Unión de Colorado de Mosquito, de la parroquia Santa Rita, en el cantón Chone.

Si es largo el nombre de la comuna, igual es el afecto que tienen a una figura del Niño Jesús que según sus creencias se halló hace años y es venerado.

Los pobladores de esta comunidad asumen que el caracol en donde está la imagen del Niño Jesús, crece año a año y hay que venerarlo en velorios donde es tradicional convidar alimentos y con velas piden por su salud, familia y por todos.

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Ese relato que surge de las campiñas manabitas forma parte del trabajo o proyecto que impulsa la Unidad de Cultura de la Universidad Técnica de Manabí (UTM), de Portoviejo, que busca recuperar el patrimonio cultural inmaterial en Santa Ana, 24 de Mayo, Olmedo, Chone, El Carmen y Flavio Alfaro para luego ubicarlo en un repositorio, en el interior de este centro de estudios.

Ángela Cevallos, directora (e) de la Unidad de Cultura de la UTM, señala que con este repositorio, al que denominarán “Archivo de la Memoria”, no solo se mostrará parte de la recuperación de técnicas ancestrales, fiestas populares, sabidurías respecto a la naturaleza, costumbres o modos de vida de las personas mayores, sino que podrán ser compartidas.

Otro eje a este trabajo es que se busca motivar a los profesionales para realizar una investigación desde estudios culturales, folclóricos, antropológicos, sociológicos, históricos, etc.; e incorporar el material compilado a las fuentes bibliográficas de las distintas facultades como material de consulta para futuras investigaciones o elaboración de tesis; y contribuir al acercamiento de la comunidad a nuestra identidad cultural.

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Cevallos agrega que el soporte investigativo será en audio, video y fotografías para que ese legado se lo conserve.

Un relato que atrae a muchos viene de la parroquia Honorato Vásquez. Se habla de la famosa Laguna, un sitio mágico, ya que existía un sinnúmero de peces y otros animales, pero también una niña encantada que generaba algunos hechos curiosos, como que escondía la ropa de las personas que llegaban a lavar su indumentaria. (I)

Los ancestros dicen que los encantos (Niña Encantada) no deben sacárselos porque puede perderse el mundo, el lugar donde está o porque ya no mostrará su encanto.Ángela Cevallos, Unidad de Cultura